Fr. Daniel López Robles, OP (1929-2024): “Manos a la obra”
Damos gracias a Dios por tu vida y por todo lo que has sembrado y construido en las misiones. Disfruta de Dios
A unos 30 kilómetros de la ciudad de León se encuentra el pequeño pueblo de Villanueva del Condado, donde nació un 21 de noviembre de 1929 nuestro ilustre misionero fray Daniel López Robles. Fueron sus padres Valerio y Benedicta, quienes tuvieron 7 hijos y conformaron una familia cristiana y muy trabajadora, de lo cual da fe Daniel a lo largo de toda su vida. Todos ellos ya han fallecido, pero aún dan testimonio de la familia López Robles sus sobrinos Jacinto, José María y Rosa Blanca.
Daniel ingresó a la Orden de Predicadores en 1947, realizando su Noviciado en el Convento San Esteban de Salamanca y profesando por primera vez sus votos religiosos como dominico en 1948. Luego cursó sus estudios de filosofía en Las Caldas de Besaya (1948-1951) y de teología en San Esteban de Salamanca (1951-1956), recibiendo el orden sacerdotal en este mismo Convento el 5 de diciembre de 1954.
Además de sus estudios eclesiásticos de filosofía y teología, realizó estudios pedagógicos en la Escuela Normal “Obispo Calienes” de Cusco, obteniendo en 1974 el título de profesor en Educación Secundaria, en la especialidad de filosofía y ciencias sociales.
Su vocación misionera le impulsa a tomar la decisión de incorporarse a las misiones dominicanas en la Amazonía peruana, viajando a Perú en 1956, cuando tenía 27 años. Era muy común entonces que los religiosos recién llegados realizaran su “noviciado misionero” en la Misión modelo de la época, Chirumbia, y este fue el caso del P. Daniel, residiendo en esta Misión durante algunos meses para luego ser destinado a la Misión de Koribeni.
Ha residido en Perú durante 57 años y su trayectoria como religioso dominico se resume en estos destinos:
- Chirumbia: 1956
- Koribeni: 1956-1957 y 1963-1967
- Timpía: 1958-1962 y 1988-1992
- El Pilar: 1968 -1969
- Puerto Maldonado: 1970
- Kirigueti: 1971-1984 y 1997. Se le considera fundador de esta Misión de la Inmaculada de Kirigueti
- Lambayeque: 1985
- Lima: 1986-1987, 1993-1996 y 1998-2010. Durante 1986 se desempeñó como procurador de las Misiones. En los años 1987 y 2002-2003 reside en la parroquia San Juan Macías, el resto de este periodo en Lima reside en el Convento de Santa Rosa, salvo en 1997 en que pasa unos meses en Timpía y Kirigueti.
- Virgen del Camino (España): 2011-2016. En 2017 fue asignado a Las Caldas de Besaya por solo unos meses, siendo asignado nuevamente a mediados del 2017 a este Convento de León, en donde reside hasta su fallecimiento en el 2024.
Desarrolló ampliamente su celo apostólico como misionero en convivencia con el pueblo machiguenga, pero conjugado este celo con los valores heredados de su familia, hicieron de él un hombre sumamente trabajador y práctico. Podríamos definir su lema principal como “ponerse manos a la obra”, y así lo hizo literalmente, construyendo con sus propias manos la casa-misión e internado de Timpía y la casa-Misión de Kirigueti, ambas en uso hasta la actualidad. Y el primer pabellón con tres aulas del Colegio de Koribeni, que actualmente funciona como Museo de la Misión. También realizó los estudios para trasladar a Koribeni la Granja Misiones de Quillabamba, pero este proyecto no llegó a concretarse.
Carpintero, albañil, mecánico, electricista, agricultor, y cuantas facetas fueran necesarias, nada era imposible para el P. Daniel, que en cuanto llegaba a una Misión de inmediato se ponía “manos a la obra” para realizar todas las construcciones y refacciones que fueran necesarias. Y destacar también sus emprendimiento como agricultor, hasta el punto que el maní (cacahuete) que producía en Timpía y Kirigueti lo vendía a la fábrica Donofrio de Lima, la marca de helados, panetones, chocolates y golosinas más conocida en el Perú hasta la actualidad.
Solo los motivos de salud le obligaron a dejar la selva y trasladarse a la costa peruana, en donde los misioneros dominicos disponían de casas y parroquias en las ciudades de Lambayeque y Lima, con pequeños periodos en sus misiones más queridas, Timpía y Kirigueti.
Hombre de carácter recio y exigente, pero también muy sonriente y bromista, de lo cual dan fe especialmente sus fieles y muchas amistades de Lima y Lambayeque, que hasta el día de hoy le recuerdan con gran cariño. Hasta el punto que siempre fue conocido por sus hermanos religiosos y amigos más cercanos como “El Tío” Daniel.
Y también destacar otras facetas más “humanas”, entre las que destaca su gran pasión por el cine y las películas, no desaprovechaba sus viajes a Lima en verano para “escaparse” al cine siempre que le era posible.
En el año 2011 los problemas de salud dificultaban su trabajo pastoral y toma la decisión de retornar a España, siendo asignado a la Virgen del Camino, y cuando requiere de cuidados más especiales, a la enfermería provincial. Perola paz y la sonrisa nunca se vieron afectadas, junto a su fidelidad a Dios y entrega a los más necesitados. Sus vivencias dominicanas y misioneras han quedado plasmadas en su diario, aún inédito, que escribió bajo el título “Recuerdos de una vida”
En el año 2024, y el mismo día de su natalicio, 21 de noviembre, nace a la eternidad en el Convento de la Virgen del Camino de León. Descansa en Paz, tío Daniel.