Las Semanas Escolares Misioneras del curso 2011-2012 llegan a su fín

Las Semanas Escolares de Animación Misionera, bajo el lema “Educación es Misión”, han sido realizada en distintos colegios durante todo el curso 2011-2012. Las dos últimas Semanas se han realizado durante el mes de mayo en los colegios Santo Domingo de Oviedo y Santo Tomás de Aquino de La Felguera, Asturias, pertenecientes a la Fundación Educativa Santo Domingo. La Fundación Educativa Santo Domingo engloba 12 centros escolares, todos ellos entroncados en el carisma dominicano. Por su origen y misión, la Fundación colabora y participa en las iniciativas promovidas por la Familia Dominicana y las integra en la acción educativa de los Centros, a la vez que anima proyectos interinstitucionales especialmente con otras entidades de Iglesia.

Estas Semanas Escolares Misioneras permiten sensibilizar a la población escolar española sobre la realidad que se vive en los puestos de misión. Se persiguen los siguientes objetivos:

• En infantil:

- Conocer las igualdades y diferencias entre los niños/as de España y los de los países más pobres, especialmente en relación a los derechos humanos.
- Conocer quién es un misionero y qué trabajo realiza.
- Concienciar de la importancia de poner su pequeño granito de arena para construir un mundo más justo y mejor.

• En primaria:

- Analizar las igualdades y diferencias existentes entre los niños/as de España y los que viven en los países en vías de desarrollo.
- Acercar a los derechos que tienen los niños y las niñas en el mundo.
- Observar y conocer otras realidades, para ver el porqué de la necesidad de la presencia misionera.
- Concienciar de la importancia de la aportación de todos para construir un mundo más justo y más misionero.

• En secundaria:

- Conocer la situación de exclusión en que viven millones de niños, niñas y jóvenes que no pueden ejercer sus derechos básicos por falta de la necesaria inversión y voluntad política en este ámbito.
- Conocer, reflexionar y participar de la labor que realizan los misioneros en los países donde tienen presencia.
- Asumir, como ciudadanos/as activos/as, la propia responsabilidad frente a las situaciones injustas y comprender que todas las personas podemos hacer algo para cambiarlas o para transformar esa realidad.