Salvador Nguema: “Lo que más me gusta es el encuentro con la gente”
Salvador nos comparte el gran trabajo pastoral y educativo que realizan los frailes en Malabo
Los frailes dominicos en Malabo trabajan mucho como docentes de religión y filosofía en colegios (Jesús María, Colegio Español, Claret, Salesianas…) y también hacen su aporte en la Universidad, en la facultad de Humanidades donde Salvador imparte varias asignaturas: antropología teológica, hecho religioso, liturgia, ética…
La actividad pastoral es muy grande pues los frailes acompañan a varias comunidades en diferentes capillas. En las parroquias participan varios coros divididos por edades e idiomas en los que cantan y en muchos casos organizan la ayuda a los más vulnerables de la Parroquia.
Son pocos frailes y llevan varias capillas por lo que celebran muchas misas a lo largo del fin de semana, Salvador nos dice que él entre 7 y 10 eucaristías cada fin de semana, que son más largas que las que celebramos aquí, alrededor de hora y veinte minutos. Salvador nos comenta que a veces las homilías son en español y fang, otras en bubie y español, para que todos se sientan parte. Ahora va Fr. Salvador Becoba asignado allí, lo que supone un alivio para ellos, ya que tienen mucho trabajo. Las familias acuden juntas a celebrar la misa, son celebraciones muy alegres y llenas de vida.
Los frailes también acompañan a los enfermos, las religiosas suelen ayudarles a llevar la comunión, pero cuando están en peor estado suelen ir los frailes por si quieren confesarse. Se hacen presentes ante el dolor de las familias en los velatorios, haciendo celebraciones de la Palabra, responsos o eucaristías.
Se ofrecen muchos catequistas, para acompañar a los niños en la fe, para ello tienen queir a la escuela de catequistas y formarse para así “Contemplad y dad lo contemplado”. Es otro de los proyectos que apoyamos desde Misioneros Dominicos -Selvas Amazónicas.
Ahora en verano organizan un campamento para los niños en la Parroquia Santa Maravillas de Jesús, para que disfruten aprendiendo y compartiendo con otros niños y contará con la presencia de Carmen, voluntaria de Misioneros Dominicos – Selvas Amazónicas.
Las familias guineanas son muy numerosas y muchas veces los padres no pueden hacerse cargo de la educación de todos sus hijos, por eso desde Misioneros Dominicos – Selvas Amazónicas se beca a algunos jóvenes. La educación pública tiene poco nivel, y la privada no siempre pueden permitírsela, ya que la matrícula de un año de Bachillerato es como el sueldo de un mes de un funcionario al empezar, a lo que hay que añadir el dinerodel uniforme y el alquiler de los libros que a final de curso tienen que devolver sin estropearlos. Para decidir qué alumnos se van a becar se conocen las circunstancias familias, y se les pide el boletín de notas al acabar cada trimestre. Además, se tiene en cuenta si están implicados en la Parroquia.
A raíz del boom del petróleo, ha habido mucha migración a Guinea de los países vecinos: Camerún, Mali, Nigeria, Benín o Senegal.
Por si fuera poco, Salvador acompaña también a los aspirantes a dominicos, a veces les faltan horas al día para hacer todo lo que quiere. Pero es feliz compartiendo la fe y la vida con su gente.
¡Gracias por venir a compartir con nosotros y acercarnos la misión de Malabo!