Nuestra misión en El Seibo

Los misioneros dominicos en El Seibo

En su labor pastoral los misioneros dominicos estaban centrados en formar comunidades de laicos cristianos, la formación de catequistas, la evangelización a través de cursillos periódicos, la visita a los campos, la promoción liberadora desde el trabajo en grupos, clubes... Se construyeron varias capillas para facilitar la participación de los fieles en el culto, sobre todo en los campos.

En la actualidad los frailes se dedican de lleno a la emisora “Radio Seybo”. Aunque pequeña y local, goza de gran audiencia y realiza una labor encomiable de concienciación social, educativa, predicación del Evangelio, defensa de la dignidad. Dados los muchos problemas existentes, el trabajo de los frailes no es fácil, siempre comprometidos al lado de los excluidos, acompañando a los campesinos sin tierra, atendiendo a los migrantes de origen haitano que sobreviven en los bateyes esclavizados con la caña de azúcar… Sus intervenciones y su compromiso tienen eco nacional a través de la prensa.

Tienen un proyecto de invernaderos Nuestra Señora de Covadonga con los que dan trabajo a jóvenes y promueven su formación, dónde cultivan pimientos, berenjenas, tomates, sandías, pepinos. También coordinan el Centro de Salud Fray Luis Oregui donde además de farmacia y médico general hay algunos especialista de medicina interna, ginecología...

Características de la misión de El Seibo

La Comunidad de Dominicos comienza su misión en 1960. Radio Seybo nace en 1974 con la misión de compartir la vida con los preferidos de Jesús desde la educación y el acompañamiento de las comunidades campesinas en su lucha por la dignidad. La provincia de El Seibo tiene 90.000 habitantes, un 20% haitianos. Hay éxodo del campo a la capital de la provincia y fuera del país. Destaca el empobrecimiento progresivo debido a que más del 70% de la tierra está ocupada por la compañía azucarera Central Romana que, desde hace décadas, viene usurpándosela a los campesinos con total impunidad.

En este proyecto de evangelización hay que destacar la presencia y colaboración, muy valiosa, de las Hermanas Misioneras del Rosario, que habían llegado a El Seybo en 1952.